Deja de pensar en Qué Dirán!

. ¿Alguna vez has dejado de pensar por ti para hacerlo por otros?

Seguro que más de una, Es el momento de cambiar el modo de vivir.

Si hablamos de nuestra vida, lo principal es pensar qué queremos y cómo lo queremos. Es decir, en la manera de llegar al propósito querido de modo que no nos marquemos algún límite, sin establecer prejuicios, o aventurando el lugar por dónde o cómo iremos para alcanzarlo. Lo importante es seguir el camino por el cual nuestra intuición nos guía. Si hacemos caso a esa vocecita que está dentro y que tantas veces hacemos callar, las cosas serían más fáciles, iríamos de una vez por el camino más recto, en vez de dar vueltas una y otra vez, rodeando lugares.

Cuando se tiene claro qué es lo que se quiere, la vida transcurre de manera más fácil, el tiempo transcurre a otro ritmo. Incluso en ocasiones, ésta resulta contraria al modo en que hasta ahora venía siendo y que habíamos aceptado como si fuese la única forma posible. Escuchándonos, transitamos por el sendero verdadero y acertado para obtener todo aquello que nos proponemos. Siendo agradecidos por lo que tenemos y pidiendo lo que sentimos nuestro, nos centramos en el tiempo que existe y así, vivimos en el ahora de la vida que nos ve crecer.

Es importante que cuando hablamos sea nuestra voz la que se escuche, la de nuestros sentimientos, que dejemos de anticiparnos pensando en lo que otros puedan o no decir, que nos olvidemos por completo de qué van a pensar de nosotros. Somos los únicos capaces de saber y de expresar quienes somos y con ello decir lo que está dentro en nuestro ser, nadie más sabe qué está en nosotros, qué nos importa, qué habita nuestra alma.

Los pensamientos son más claros y se concretan en significado, cuando hablamos desde el corazón, cuando nos dejamos llevar por lo que está en nuestro interior, cuando somos capaces de expresarnos sinceramente y con transparencia en todo lo que forma parte del día a día, de la vida. Ahí, en esa consciencia y realidad, es cuando podemos decir que nos sabemos como realmente libres. Sólo, siendo y haciendo con el amor del corazón sincero y claro, seremos capaces de ver la luz que siempre nos acompaña.

Cuando dejemos de pensar en cómo decir las cosas o adornarlas pensando en el qué dirán los que están al otro lado y nos escuchan -por miedo, por vergüenza, por pánico, por nervios, por sonrojarnos, por empezar a tartamudear, a temblar, o un sinfín de otras posibles adversidades-, seremos quienes de seguir el verdadero camino para el que hemos venido a esta vida. con Amor.