16.2.13

el Instante



el Instante deja de serlo
cuando has sentido su esencia
cuando su presencia, ya ha dejado de existir
cuando todo se convierte en recuerdo y,
piensas, recuerdas o escribes sobre él en sí mismo

Amo la vida, 
por ser la gran oportunidad de experimentar 
infinitas sensaciones con las cuales poder crecer, 
por tener, al menos, una realidad real
por ser consciente de este gran regalo,
por ser la dicha y la gracia que Dios me ha concedido
sin siquiera, 
yo recordar que tal vez,
se lo haya pedido en alguna ocasión!

Amo al Amor en entrega a aquel que más me fastidia,
porque reconozco en ese ser,
que yo tengo parte reflejada que me ofende o daña, 
porque aunque no quiera reconocerlo sé, 
que mi ser se siente dolido sabiendo que 
lo que no me gusta de él, 
es lo que veo en quien tengo enfrente y
es lo que realmente está brotando desde mi interior

Para bien o no tan bien siempre,
cuando hay algo que nos hace recapacitar
reaccionar de un modo u otro 
en un caracter, en un gesto, en un modo de ser,
en y por algo, 
hemos de trabajar en ello para con nosotros,
hasta que ese instante 
se quede borrado como algo,
que nos hacía sentir molestos

Cuando ese hecho deja de molestarnos, 
de repetir conductas en nosotros mismos es
cuando ya ha dejado de existe el daño
se transmuta en un echo del ayer,
es un instante pasado!
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario